Digitalización

Digitalizar quiere decir convertir a lenguaje máquina, es decir a un sistema de comunicación que permita ser interpretado por un ordenador o dispositivo compatible. Por ejemplo transformar un escrito en papel en un documento PDF. Para este proceso son necesarios los llamados “periféricos”, dispositivos electrónicos (de entrada) que llevan a cabo transformaciones a un nuevo código, a modo de intérpretes. Algunos de los más comunes son el teclado, el mouse, las pantallas táctiles, el escaner, el micrófono, la webcam, etc.

Un punto clave en la digitalización es lo que se llama conversión, y la misma conlleva una “pérdida de información”, ya que el documento original sufre una transformación (“compresión” a datos digitales). El  programa / dispositivo encargado de realizar el proceso siempre tiene alguna/s limitación/nes (por ejemplo: de almacenamiento, de resolución). Sin embargo, digitalizar un documento hoy en día proporciona valores cercanos o iguales al documento original.

Muchos años fueron dedicados desde la informática a solucionar los problemas devenidos por la ola creciente e incipiente de digitalización de fuentes y documentos, mediante la creación de aplicaciones o programas (software) que permitieran comprimir la señales; eliminando características innecesarias o imperceptibles desde el punto de vista del receptor promedio. Un ejemplo claro lo encontramos en la música digitalizada, el wav (utilizado en CD-DA o Disco compacto de audio digital) es un tipo de formato que presenta el sonido sin compresión alguna (o pérdida de información) mientras que el mp3, es un formato que elimina escalas no audibles para el oído humano o modifica los valores originales en favor de otras características. La pérdida de calidad permite almacenar más música y manipular archivos más livianos (favorece la reproducción, dispositivos menos potentes, reproducción vía streaming), siendo el mp3 considerablemente de menor peso en megabytes (unidad de medida de almacenamiento).

Escuchar un mp3 o un CD-DA altera de forma notable la experiencia de escuchar música, ya que esta mediatización establece, de cierta forma, parámetros cualitativos, de empobrecimiento en el primer caso.

Apple fue la primera empresa en estimular el campo del video digital en ordenadores personales incorporando la entrada FireWire (llamado también i.link, sistema de comunicación de alta velocidad basado en el estándar IEE1394, el cual permite transmitir a tiempo real sonido e imagen sin ningún tipo de perdida) en su hardware por defecto, convirtiendo a sus computadores en potenciales islas de edición (término técnico que define los equipos que permiten la manipulación de material audiovisual). Además incorporó a su sistemas operativos el software QT (Quick Time) que además de posibilitar la reproducción de video digital podía contener otro tipo de documentos en su interior (textos, animaciones, entornos virtuales).